Dal Maschio comienza su actividad trabajando en el campo de la maquinaria agrícola.

La empresa se convierte en un taller mecánico para la reparación de vehículos agrícolas y no agrícolas.

Durante los años siguientes a la segunda guerra mundial, la empresa comienza la producción de maquinarias para la cosecha de sorgo destinado a la producción de escobas para las diversas realidades, artesanal y no artesanal, presentes en el territorio.

Durante los años 60, Dal Maschio en su taller de Mirano (Venecia), es capaz de ofrecer una amplia gama de máquinas y automatización (de tipo electromecánico) para el tratamiento del sorgo, incluso después de la cosecha, así como también para automatizar la producción final de las escobas. La producción de maquinaria crece y comienza a fabricar para empresas extranjeras (por ejemplo, en EE. UU., África del Norte, Oriente Medio), siendo capaz de disponer de unos treinta modelos especializados para diferentes tareas.

Al principio de los años 70, algunos componentes de las escobas empiezan a producirse con plástico mediante el proceso de moldeo por inyección. La empresa se involucra en este nuevo proceso productivo presentando sus propios sistemas de automatización. En la feria del sector de 1973, se presenta el extractor MDM1, el primero en Italia.

Gracias al alto desarrollo del uso de materiales plásticos en las siguientes dos décadas, junto con los esfuerzos tecnológicos y las habilidades de los diseñadores en su nueva sede en Salzano (Venecia), la empresa establece firmemente su posición en este mercado. Dal Maschio ha estado creciendo constantemente desde entonces.